lunes, 15 de febrero de 2010

Motivación en Base a Resultados

¿Estás cumpliendo lo que te propusiste al principio del 2010?
¿Qué fue, ejercicio, dejar de fumar, comer mejor, levantarte/acostarte más temprano, elevar de nivel la relación con esa persona especial, subir tus ventas?
Si respondes que "si" a cualquiera de estas preguntas, es que has de estar en constante movimiento, de preferencia en dirección a tus objetivos, ¡bien hecho!
Ahora, ya puedes saber que muchísima gente, de hecho la mayoría, nunca cumple sus metas, porque piensa que entrará en acción cuando estén motivados, y eso es un error. Están gastando la energía, en ¡nada!
Mira, digamos que lees un libro de motivación, o escuchas a un "motivador". Acaba la lectura o la conferencia, y sales bien motivado, emocionado y comprometidísimo en cumplir tus metas. (Te hago el comentario de no te digo no leas, ni que no asistas a seminarios, ¡para nada! Tu vida solo puede transformarse con el movimiento, y el movimiento es crecer a través del aprendizaje y de la experiencia. Lo que digo es que si dependes de sólo recursos externos a ti para motivarte, puedes tener un problema). Luego, a los dos o tres días de terminar la lectura o haber asistido a la conferencia, esa "motivación" se la llevo la…tristeza.
Y ahora te sientes peor. Es el efecto rebote, como cuando tienes gripa y te pones gotas para la nariz, y se te abren las fosas, para que al rato estén ¡aún más cerradas! Bueno, o sencillamente, sigues viviendo tu vida de manera cotidiana, sabiendo que es posible lograr más ¿viste la película “Despertares”? ¿La recuerdas?
Tal vez ahora te preguntes ¿Por qué sucede esto?
Esto sucede porque la motivación que obtienes al leer un libro, escuchar a un "motivador" o asistir a un evento de superación personal no es basada en tus propios resultados, sino en futuros resultados que estas tratando de conseguir.
Como esta no es una motivación basada en hechos, o sea en tus resultados personales, es una motivación “por encima” que se erosiona fácilmente por la acción de tus miedos, dudas, creencias limitantes, o las críticas de quienes te rodean.
Este sería el esquema del proceso anterior: Motivación > Acción > Resultados
Así que vivir la vida dentro de este esquema te dará una clase de resultados de los que tú mismo puedes opinar en base a tus experiencias personales.
Habrás oído escuchado la frase: "Camarón que se duerme se lo lleva la corriente". ¿Sabes porque estaba dormido el susodicho camarón? Porque no tenía motivaciónnn. No nadaba, tenía todo a la mano, no necesitaba motivarse, y se quedó dormido, se lo llevó la corriente, y de ahí pasó a la red del pescador y seguramente ya te lo comiste en un rico coctel…Supongo que tú no quieres acabar siendo devorado por alguien más ¿verdad?
Entonces, ¿hay otras maneras de motivación?
Pues, hay varias, muchas podríamos decir.
Una de ellas es la “Motivación en Base a Resultados”.Esta una motivación que crea un círculo virtuoso, que te lleva a tomar acción, y de ahí a estar más motivado, y así sucesivamente. Por lo tanto es de gran poder y muy duradera. Dicho de otra manera, tomas acciones simples y sencillas en la dirección de tus metas mayores y trascendentes, que se traducen en resultados efectivos, y estos resultados generan motivación, que te “atrae” a tomar más acciones, reforzando tu proceso de acción y motivación.
Acción > Resultados > Motivación
Ahora haz esto para lograr la motivación que tanto deseas, pues te hace sentir bien y poderoso, es ese estado de plenitud de recursos tan buscado:
1) Identifica las acciones que debes tomar para realizar tus metas y objetivos.
2) Toma acción
3) Observa los resultados y gózalos, sin importar su tamaño o impacto en tu vida.
3) La motivación vendrá a ti
4) ¡Disfruta de tus estados de plenitud de recursos!

Si las acciones que tomas no te dan los resultados que buscas, revisa si la meta es la adecuada, si tienes los recursos interiores que requieres, y si lo que haces es apropiado para ti y los que te rodean. Si algo no está “alineado”, ajusta la estrategia. Si todo está en orden, recuerda las 3 P’s – Perspicacia, Paciencia y Persistencia.

¡Muévete y haz realidad tus sueños!

domingo, 7 de febrero de 2010

Sueños mas Reales

Mucho del resultado de nuestros sueños depende de que tan profundamente los hayamos hecho nuestros, que tanto respiramos, comemos, dormimos y vivimos con ellos. Cuando logramos que nuestros sueños nos empujen y nos jalen en la dirección que nos hemos propuesto, y esa dirección es buena para nosotros y los que nos rodean, sin causar daño en alguien o en algo, entonces tenemos unos sueños poderosos.
Ahora, ¿de qué manera llevar los sueños a lo más profundo de nuestro ser? Pues hay varias maneras, y yo te comparto esta técnica:
a) Utilizar la RCP (Relajación Consciente y Profunda) para acceder al nivel de “taller mental”, donde tienes varias pantallas para visualizar –pasado, presente y futuro-.
b) En la pantalla del futuro (a la extrema derecha de las tres) coloca la imagen del sueño, aunque ahora velo mas como una realidad. A partir de este momento estás construyendo tu destino.
c) Ahora, entra tu a la pantalla, donde tú eres el personaje principal de tu sueño -ahora ya una proyección- y empieza a ver todo lo que te rodea. Personas, objetos, colores, luz y todo lo que puedas observar y que sabes que te dirá que estás realizando tu proyecto.
d) Para continuar, ahora pon atención en los sonidos, quien te habla, tal vez tu mismo te estés hablando, puede ser que haya sonidos de cosas o de la naturaleza y de todo lo que te pueda rodear.
e) La siguiente fase es revisar todo lo que sientes. Y este punto es muy amplio. Aquí hablamos de que sientes externamente: la temperatura, la humedad, tal vez el roce del viento en tu piel…luego viene la parte de tus sensaciones internas, hablando de tu cuerpo. ¿Hay movimiento en tu cuerpo, en tus músculos o huesos? ¿lo provocas tú o algo externo lo provoca? Y ahora, ¿qué sientes en tu interior? ¿en qué parte de tu cuerpo está esa sensación?
f) Cuando ya has creado las imágenes, las audiciones y las sensaciones de tu futuro, pasamos a la parte de crear una señal –lo que en Programación Neurolingüística llamamos anclaje- que con un pequeño movimiento de alguna parte de tu cuerpo, tal vez quieras unir las puntas de tus dedos, para “llamar” a todo lo que está disponible dentro de tu interior y darte la fuerza y la motivación para hacer lo haz de hacer para cumplir con tus propósitos más elevados.
Por ahora, que logres una excelente semana y sueñes a lo GRANDE!

sábado, 6 de febrero de 2010

UN DOMINGO CUALQUIERA

Ese es el título de una película sobre el futbol americano - a propósito de que ya tenemos aquí el Súper Domingo!! - deporte que tuve la oportunidad de practicar, empezando la gran mayoría del equipo desde cero y recibir paliza tras paliza hasta ganar un campeonato de categoría intermedia a nivel nacional derrotando a los mejores equipos de Monterrey y de DF.
El caso es que en ese deporte aprendí 4 capacidades fundamentales en la vida personal y profesional: Comunicación, Liderazgo, Motivación y Trabajo en Equipo, los cuales ayudo a desarrollar en los participantes a mis diferentes cursos y programas.
Y hablando de Motivación, te dejo aquí un link a un video que a mí me pone aún la piel chinita chinita, como jugador y como coach

http://www.youtube.com/watch?v=X9ct3duufA4

Espero disfrutes este fin de semana...AL MAXIMOOO

martes, 2 de febrero de 2010

Para cambiar, dejar ir

¿Te has cambiado de casa? Caray, como se juntan cosas sin que uno se dé cuenta: manualidades que los hijos hacen en la escuela y nos obsequian, los libros de que nos vamos haciendo, el curso de inglés en video-cintas, la colección de audio-casetes que ya no hay donde escuchar, las cosas que guardamos porque un día “podrían” ofrecerse, y así sucesivamente hasta llenar cajas y cajas.

¿Por qué guardar tanta cosa? Hay muchas razones, como las que pueda tener cada persona para guardar, y una razón diferente para cada cosa que guarda. Aun así, en el fondo de la caja donde vamos guardando todas esas cosas dentro de nosotros, hay una gran fuerza que nos lleva a tomar la decisión de quedarnos con algo que a todas luces ya no tiene fines prácticos –y muchas veces, sentimentales, que en su lado negativo, nos impiden adelantar a un estado de mayor avance humano y de aprendizaje-. Esa fuerza es el miedo. Miedo a no tener la capacidad de reemplazar ese objeto, a no tener la capacidad y recursos internos para traer de nuevo un objeto más actualizado –e incluso ahora, de acuerdo a las nuevas tecnologías que permean cada espacio y momento de nuestras vidas- a nuestro entorno. También miedo de que al dejar ir algo que tiene un fuerte contenido emocional para nosotros, dejemos de honrar la memoria de la persona, de la situación o del momento que está relacionado con ese objeto, o incluso ese recuerdo.

Bien, ¿y ahora que sé esto, que? Tener esta información profunda de porque guardo las cosas no me libera de las conexiones con los objetos, o sentimientos o recuerdos, así que sigo atado, o sea igual que al principio ¿no?

Bueno, tal vez cientos de veces hemos escuchado: “Déjalo ir”. Si, solo que me deshago de algo, y después, en lugar de realmente sentirme aliviado hasta me siento culpable por deshacerme de algo que alguna vez tuvo un propósito en mi vida. Entonces, ¿qué hago?

La recomendación es DEJAR IR. Te diré cómo.

Escoge un lugar cómodo, donde puedas estar tranquilo por unos 15 minutos.

Ahora, ya en ese lugar, toma asiento, donde pueda estar cómodamente sentado, con la espalda recta, el cuello y los hombros relajados, los pies bien asentados en el suelo, las rodillas formando un ángulo recto, y las manos descansando en los muslos.

A continuación, haz unas respiraciones profundas. Ten esmero al hacerlas, recuerda que la respiración profunda se hace levantando el abdomen, para que tu diafragma pueda bajar, provocando que el aire baje a la base de los pulmones -ya sabes que son triangulares, y la base está en la parte inferior- y de esta manera llenarlos por completo.

Mientras estás haciendo estas respiraciones profundas, te vas relajando, cada vez más. Ya en este estado, haz un pequeño viaje por tu mente, por tus recuerdos, y escoge uno en que haya una molestia o incomodidad. Algo que sea manejable, ya que conforme vayas practicando este ejercicio, podrás avanzar en recuerdos más fuertes para ti.

Ahora, pon tus manos frente a tu pecho con las palmas hacia arriba, con los brazos cómodos y relajados, y mentalmente pon una imagen de ese recuerdo en tus manos. Obsérvalo, como hace un observador externo de una situación, y encuentra que en esa experiencia hubo algo positivo, un aprendizaje. Fue algo que pasó en tu vida, y parte de las experiencias y vivencias que el día de hoy te hacen ser quien eres hoy, y por lo tanto, es algo digno de ser honrado en su mejor parte.

En la palma de tu mano izquierda coloca una imagen de ese recuerdo que te molesta o incomoda. Ahora, esa imagen métela en la imagen de un globo. Dentro del globo, va el hecho. En el globo, en la superficie, van las emociones y sentimientos. Aún con lo molesto o desagradable que pueda ser el recuerdo de esa vivencia, es parte de tu historia personal. Por lo tanto, ve esa globo y su contenido, y agradécele haber formado parte de tu ser, y ahora déjalo ir. Ve, mentalmente, como ese globo empieza a elevarse, y mientras sucede esto, notas una sensación de alivio y tranquilidad que inicia a llenar tu pecho. Mientras tanto, el globo continúa subiendo y entonces, también empieza a desplazarse hacia atrás, hacia el pasado, que es donde pertenece.

En este momento, crea una imagen para la parte brillante, esa experiencia, ese aprendizaje, eso positivo con qué haz decidido quedarte, y colócala en las palmas de tus manos. Apréciala, agradécele haberla vivido, y esa imagen ponla, físicamente con tus manos, en el centro de tu pecho. Deja que impregne todo tu ser. Y continua con las respiraciones profundas.

Ahora, aún con esa relajación, cuenta en tu mente del 1 al 3. Al llegar al 3 abrirás tus ojos, y te sentirás perfectamente bien, muy tranquil@ y recargado de energía positiva.

Puedes continuar con tu vida, de una manera más ligera y productiva, hacia el cumplimiento de tus misiones más altas.

lunes, 1 de febrero de 2010

CREENCIAS DE EXITO

He aquí una creencias acerca del éxito y de la felicidad, de origen Oriental.

Ten presente que tu sistema de creencias (como lo hemos platicado y practicado en mis talleres) determina el grado de interrelación que tienes con el mundo que te rodea, y dentro de ese sistema también, están las programaciones que te dan poder –o te impiden- alcanzar tus metas. También hazte consciente de que adquirir más creencias no significa dejar las que ya tienes, ni significa dejar de ser tú. Más bien, quiere decir, que amplíes tus horizontes.

Da más a las personas de lo que ellas esperan y hazlo con alegría. (Lo que ahora se llama "Valor Agregado").
Cuando quieras decir "te amo", hazlo con sinceridad.
Cuando digas "lo siento mucho", mira a la persona a los ojos.
Nunca te rías de los sueños de otras personas. (Al contrario, estimúlalos).
Habla lento y piensa rápido (¡Y no al revés!)
Cuando te des cuenta que cometiste un error, toma las actitud necesaria. (Reconocer con humildad).
Recuerda estas tres erres: Respétate a ti mismo, Respeta al prójimo y Responsabilízate por sus acciones.
No permitas que una pequeña disputa arruine una gran amistad. (Al tomar una decisión, antes de encenderte lleno de enojo, evalúa que es más importante, el hecho o cuidar la relación).
Pasa más tiempo solo.
Reparte tu conocimiento: es una forma de alcanzar la inmortalidad.
Nunca interrumpas cuando estás siendo elogiado.
Cuida tu salud.
Una vez al año ve a algún lugar donde nunca estuviste antes.
Si ganas dinero, ayuda a los otros mientras estés vivo. Esta es la mejor satisfacción de la riqueza. Recuerda que no conseguir algo que deseas, a veces es un golpe de suerte.
Recuerda que la mejor relación es aquella donde el amor de uno por el otro es mayor que la necesidad de uno por el otro.